Más allá de la veracidad de la noticia (bastante dudosa), Perelman sostiene que el hecho no es ningún disparate desde el punto de vista de la Física. Según explica, “las balas no se mueven durante todo el tiempo con la velocidad inicial de 800-900 metros por segundo, sino que, debido a la resistencia del aire, van cada vez más despacio y al final de su trayectoria, pero antes de empezar a caer, recorren solamente 40 m por segundo. Esta era una velocidad factible para los aeroplanos de entonces. Por consiguiente, la bala y el aeroplano podían volar a una misma velocidad, en un momento dado, y, en estas condiciones, aquélla resultaría inmóvil o casi inmóvil con relación al piloto. Es decir, éste podría cogerla fácilmente con la mano, sobre todo con guante (porque las balas se calientan mucho al rozar con el aire).”
El escritor ruso Yakov Perelman recoge en su “Física Recreativa"
Perelman escribió muchísimos libros de divulgación científica. Su biografía y referencias a su obra las podéis encontrar en... http://es.geocities.com/yakovperelman1/biografia/biografia.html
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1 comentario:
En mi opinión, este hecho es discutible. Doy por hecho que las balas no van siempre a la misma velocidad, ya que esta varía desde el reposo hasta su estado en el aire, pero no comprendo como puede afirmar que la velocidad inicial es de 800-900 metros por segundo, ya que supuestamente, inicialmente se encuentra en reposo. Por otro lado, en el caso de que se pudiera alcanzar la velocidad exacta del aeroplano, creo que si podría ser posible que este pudiera cogerla, ya que como bien dice, sería como cogerla en su estado inmovil o de reposo.
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